47. Bangladesh. No estaba en mis planes (hasta hoy)
Oídos abiertos, mente abierta y espíritu abierto son la puerta a todas las oportunidades que puedas imaginar. Y las que no te imaginabas, también.
No hay más que abrir un poco los ojos, escuchar y entablar conversaciones con cualquiera que puedas tener alrededor para que cualquier cosas pueda ocurrir. Siempre hay algo que te hace conectar, sorprenderte o aprender. Y hasta hacer negocios o crecer profesionalmente, como te guste más llamarlo.
Estas últimas semanas están siendo de una riqueza máxima en este tipo de encuentros y oportunidades, y a menudo, donde menos te lo esperas.